Aunque suele ser el personal médico el encargado de suturar cualquier herida (puede haber excepciones); la retirada de grapas y puntos de sutura es tarea de enfermería.
Se suelen retirar entre los 7 y los 10 días posteriores a la intervención, siempre y cuando la evolución de la cicatrización haya sido la correcta. Aunque ciertos tipos de puntos, como los de suturas de retención, suelen dejarse un período de tiempo más largo que puede llegar a ser de hasta 21 días.
Así mismo, si las suturas y grapas permanecen en la herida más tiempo del necesario también existen riesgos, ya que aumenta la probabilidad de infecciones.
Es importante recordar que antes de iniciar el procedimiento debemos realizar una correcta higiene de manos y ponernos los guantes estériles. También, tanto en el caso de la sutura como las grapas, se debe humedecer la herida para facilitar el retirado del material.
Retirada de suturas:
- Se debe coger el nudo del punto que vamos a retirar con unas pinzas y
- tirar suavemente para separarlo de la superficie de la piel.
- Situar el bisturí (o la tijera) por debajo con la hoja cortante hacia arriba (de lo contrario podríamos cortar al paciente) y cortar el hilo.
- Valorar el correcto estado de la sutura y la presencia de dehiscencia; si todo está correcto, continuar con el procedimiento.
- Si se trata de un solo punto, con ayuda de las pinzas tiraremos de él hasta sacarlo. Si, en cambio, se trata de una sutura continua con varios puntos, debemos ir sacando el hilo siempre a medida que cortamos un punto, dejando solo un extremo en el exterior; de lo contrario, si cortamos por ambos lados, podría quedarse material dentro de los tejidos del paciente.
Retirada de grapas:
- Se trata de un procedimiento mucho más sencillo, ya que tan solo se debe situar la punta de la desgrapadora por debajo de la grapa.
- Apretar el instrumento hasta que las puntas de las grapas se separen completamente y retirar con cuidado de no hacer daño a
- l paciente, aunque la grapa saldrá sola con facilidad.
Cuidados posteriores a la retirada:
- Se debe limpiar la zona con un antiséptico y valorar la colocación de un apósito, o bien, dejar la herida al aire.
- Se aconseja colocar tiras adhesivas estériles tras la retirada de los puntos y las grapas para evitar posibles reaperturas de la herida.